La amatista es una piedra hermosa de color violeta que tiene una acción sedante y tranquilizante, siendo poseedora de la llama energética del poder y de la liberación espiritual.
El rayo violeta emitido por esta piedra tiene la capacidad de pulverizar las energías negativas y desarrollar la visión del tercer ojo.
Este rayo es transformador cuando se utiliza con precisión, tiene la posibilidad de transmutar las energías negativas en positivas, de eliminar energías intrusas y pensamientos del pasado, que como fantasmas muchas veces no permiten el desarrollo individual de la persona.
La amatista es una piedra que puede conseguirse con facilidad, en distintos tamaños e inclusive conformando acumulaciones de piedras. En caso de pérdida de seres queridos, dolores de cabeza, nerviosismo, o intranquilidad, la denominada piedra del espíritu puede ser de una gran ayuda.
Como piedra de contemplación, colgante, o en cualquier forma disponible colocándola en un lugar de la casa, la amatista puede ser un poderoso auxiliar de tu desarrollo energético y espiritual.
Una vez que has conseguido tu amatista vamos a limpiarla ya que recuerda que las piedras pasan por muchas manos y absorben energías de las personas, siempre que adquirimos una piedra-cuarzo tenemos que limpiarla.
Para esto vas a preparar un litro de agua con una cucharada sopera de canela, que sea canela natural ya que ahora en el mercado también se encuentra canela sintética/artificial, a mi en lo personal me gusta usar recipientes de cristal, pero si no contamos con uno puede ser también un recipiente de barro, en caso que tampoco cuentes con ello pues uno de plástico está bien.
Bien, ahora introduce la amatista y ahí la dejarás durante 24 horas, luego de que haya pasado dicho tiempo, sácala del recipiente, deja que por si sola se seque, posteriormente la vas a programar al atardecer de la siguiente forma:
Llévala hacia el centro de la frente y obsérvala durante tres minutos mentalizando los beneficios que deseas conseguir. Trata de pedir con fe y de imaginar que dentro de la amatista, como si fuera una película, verás todo lo positivo que esta piedra te dará en el futuro.
Luego lleva la piedra hacia la zona de la garganta y de tu corazón realizando la misma operación anteriormente descrita.
Toma ahora la amatista con la mano derecha y apriétala fuertemente imaginando que su luminosidad violeta envuelve todo tu ser. Mantenla en tu mano derecha durante tres minutos y estará lista para colgar, o utilizarla de las formas que ya mencionamos anteriormente.
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